Lejos quedan atrás los tiempos en que habar de una vivienda ecológica era solo cosa de la ciencia ficción. Los nuevos avances científicos en cuanto a arquitectura respetuosa con el medio ambiente empiezan a dar sus frutos y cada vez son más las empresas que ofrecen servicios de construcción de casas ecológicas y servicios de certificación energética.
Si bien, en España, y a pesar de contar con los recursos naturales y un clima muy apropiado para este tipo de viviendas está claro que no hemos aprovechado todo el potencial para generar energías verdes, algo que quedará repercutirá en las facturas de los suministros de nuestro hogar.
En el Código Técnico de la Edificación se recogen ya algunas medidas orientadas a mejorar la eficiencia energética de las viviendas españolas, en el caso de las viviendas ecológicas la apuesta va más allá, puesto que desde su misma concepción está integrada en su entorno.
Características de las viviendas con una Alta eficiencia energética:
- Materiales: los materiales de construcción deben ser lo más naturales posibles, y su fabricación y transporte deben tener un impacto reducido en el entorno. Materiales como la madera, un material saludable al tacto que, tiene una baja conductividad térmica lo que hace que nos adaptemos mejor a él sin tener pérdidas de calor bruscas mientras está en contacto con nuestra piel. Este confort térmico propio de la madera permite, a su vez, reducir la necesidad de calentar o enfriar los ambientes.
- Ahorro energético: no solo se reduce el gasto de energía al generarla de forma autónoma (como puede ser con la instalación de placas fotovoltaicas), sino también tratando de consumir la menor cantidad posible, empleando electrodomésticos de bajo consumo, así como factores tales como una correcta orientación solar que ayudarán a ahorrar energía de iluminación y calefacción.
- Ahorro de agua: instalando dispositivos que controlen y economicen el uso del agua, la instalación de depósitos de agua de lluvia, entre otras innovaciones pensadas en la eficiencia energética.
- Ventilación: la orientación de las ventanas para favorecer las corrientes de aire, de modo que podamos refrescar la vivienda de forma natural, y reduzcamos el uso de aires acondicionados.
- Calefacción y aislamiento: el correcto aislamiento de una vivienda es clave para reducir el consumo en calefacción. Una muy buena alternativa puede ser el uso de aislantes de fibras vegetales o de materiales reciclados, así como calefacciones que dispongan de sistemas de acumulación nocturna de calor y energía fotovoltaica, son buenas soluciones para conseguir un mayor balance en el tándem sostenibilidad-ahorro.
Todos estos planteamientos para conseguir la máxima eficiencia energética (la de tipo A) los teníamos muy claros mi pareja y yo cuando decidimos volvernos a Pamplona después de muchos años viviendo en Inglaterra.
Por fin habíamos conseguido ahorrar lo suficiente como para llevar a cabo nuestro proyecto de casa rural.
Contábamos con una vivienda no muy lejos de la ciudad que había pertenecido a mis abuelos, tan solo teníamos que rehabilitarla y conseguir las licencias pertinentes para empezar nuestro negocio de turismo rural.
Queríamos una reforma que tuviera muy en cuenta la eficiencia energética, aunque sabíamos que en España aún queda mucho por recorrer para mejorar en este sentido, y que no son pocos los obstáculos que provienen, en la mayoría de los casos, del propio Estado y de quienes se llenan sus bolsillos con las desorbitadas facturas de gas y luz.
Sabíamos que necesitábamos el asesoramiento de los mejores profesionales en materia de rehabilitación de viviendas y eficiencia energética, tuvimos la suerte de contar con los servicios de gruponavitec, empresa de la que ya conocíamos algunos trabajos de reforma de viviendas en Pamplona.
De entre todos sus trabajos, a mí me había gustado especialmente su reforma de una vivienda unifamiliar en Etxarri-Aranatz en la que habían empleado, como sistema de calefacción, un suelo radiante en toda la superficie de la vivienda.
El suelo radiante es un sistema muy eficiente por el hecho de utilizar la propia superficie de la vivienda para calefactarla, se eliminan corrientes de aire y los excesos de calor en las zonas cercanas a los radiadores.
Este era el tipo de soluciones que estábamos buscando a la hora de reformar nuestra vivienda y adaptarla a nuestras necesidades.
Nos habíamos propuesto cumplir con el binomio funcionalidad-diseño en una vivienda que queríamos que se integrara perfectamente en su entorno natural y aprovechara los diferentes espacios tras haber realizado un análisis pormenorizado del proyecto.
Finalmente, conseguimos nuestro objetivo de vivienda ecológica los técnicos de certificación energética no daban crédito al ver los resultados de su evaluación.
Sin duda, con un buen trabajo de reforma y rehabilitación pueden hacerse milagros casi con cualquier vivienda y, lo que es más importante, que esta reforma esté al servicio no solo de un menor gasto en nuestras facturas sino en viviendas realmente ecológicas que tengan un menor impacto en el medio ambiente.