Cuando se tiene una casa en la playa y se quiere llevar a cabo una reforma es importante elegir los materiales adecuados para los suelos y las pinturas de las paredes, ya que es fundamental que estos puedan resistir las condiciones específicas del entorno costero. La exposición al sol, la salinidad del aire y la humedad son factores que considerar al seleccionar los mejores tipos de suelos y pintura para asegurar una apariencia duradera y resistente al clima marino.
En este sentido, elegir no siempre es sencillo puesto que en el mercado nos podemos encontrar decenas de opciones diferentes para elegir. Por eso, os hemos querido preparar un pequeño resumen para que podáis ir con las ideas claras y que la reforma sea fácil desde el primer momento. Y, para ello, hemos contado con los consejos de los expertos en la materia de Briconeo, que están especializado en todo lo referente a revestimientos de suelos y paredes, quienes no han duda en aportar los siguientes datos:
- Suelos:
- Baldosas de cerámica o porcelana. Estos materiales son excelentes opciones para las zonas costeras debido a su durabilidad y resistencia al agua y la humedad. Además, son fáciles de limpiar y mantener, lo que los hace ideales para pisos expuestos a la arena y el agua.
- Pisos de madera resistente. La madera de teca, elipe o ipe son opciones populares para suelos de exterior en áreas costeras. Estas maderas son naturalmente resistentes a la humedad y a los insectos, además de brindar una apariencia cálida y natural que se integra bien con el entorno playero.
- Suelos de piedra natural. Las piedras como el granito, el mármol o la pizarra son opciones resistentes y elegantes para los suelos en una casa de playa. Estos materiales pueden soportar la exposición a los elementos y ofrecen una sensación fresca y natural en el ambiente.
- Pintura de paredes:
- Pintura resistente al moho y a la humedad. Dado que las áreas costeras suelen tener una mayor humedad, es esencial elegir una pintura resistente al moho y a la humedad para las paredes interiores y exteriores. Estas pinturas ayudan a prevenir el crecimiento de hongos y moho, y son más duraderas en condiciones de alta humedad.
- Pinturas acrílicas o de látex. Las pinturas acrílicas o de látex son una buena elección para las paredes en la playa debido a su resistencia a los rayos UV y su capacidad para soportar la exposición al sol sin decolorarse fácilmente. También son fáciles de limpiar y mantener.
- Pintura resistente a la salinidad. En las áreas cercanas al mar, es recomendable utilizar pinturas específicas que sean resistentes a la salinidad del aire y al rocío salino. Estas pinturas están formuladas para proteger las superficies de los efectos corrosivos de la sal, manteniendo las paredes en buen estado durante más tiempo.
Además de elegir los materiales adecuados, es importante realizar un mantenimiento regular de los suelos y las paredes en una casa de playa. Esto implica limpiar y sellar los suelos según las recomendaciones del fabricante, así como mantener las paredes libres de moho y humedad.
¿Qué hay que tener en cuenta a la hora de reformar una casa en la playa?
Al reformar una casa en la playa, es importante considerar una serie de aspectos para garantizar que el proceso de renovación sea exitoso y se adapte a las necesidades específicas del entorno costero. Por ello, habrá que tener en cuenta:
- Normativas y permisos. Antes de comenzar cualquier reforma, es crucial investigar y comprender las normativas y regulaciones locales que afectan a las propiedades costeras. Algunas áreas pueden tener restricciones específicas en cuanto a la altura de los edificios, el uso de materiales de construcción o la protección del entorno natural. Asegúrate de obtener los permisos necesarios antes de comenzar cualquier trabajo de reforma.
- Protección contra la corrosión. Dado que las casas en la playa están expuestas a la salinidad del aire y al rocío salino, es importante elegir materiales y revestimientos que sean resistentes a la corrosión. Opta por productos y tratamientos específicos que protejan las superficies metálicas, como puertas, ventanas y barandas, para prolongar su vida útil y reducir el riesgo de daños causados por la sal.
- Ventilación adecuada. Las áreas costeras suelen tener una mayor humedad, lo que puede llevar a problemas de condensación y moho. Al reformar, asegúrate de proporcionar una ventilación adecuada en las áreas propensas a la humedad, como baños, cocinas y sótanos. Esto puede incluir la instalación de ventiladores, rejillas de ventilación y sistemas de extracción de humedad para evitar la acumulación de humedad y garantizar un ambiente saludable.
- Protección solar. El sol puede ser intenso en las zonas costeras, por lo que es importante considerar medidas de protección solar en la reforma de una casa en la playa. Esto puede incluir la instalación de persianas, toldos o películas protectoras en las ventanas para reducir la entrada de calor y proteger los interiores de los dañinos rayos UV.
- Resistencia a los elementos. Las casas en la costa están expuestas a los elementos, como vientos fuertes y lluvias intensas. Al realizar la reforma, considera la resistencia y durabilidad de los materiales que se utilizarán. Opta por revestimientos exteriores resistentes, como revestimientos de vinilo o cemento, que puedan soportar las condiciones climáticas adversas.
- Diseño abierto y luminoso. Una casa cerca del mar se beneficia de un diseño abierto y luminoso que aproveche al máximo la belleza natural del entorno. Considera la posibilidad de crear espacios abiertos que permitan una buena circulación del aire y la entrada de luz natural. Además, elige colores claros y materiales reflectantes que acentúen la sensación de amplitud y luminosidad.