Los tiempos avanzan y vienen caracterizados por la necesidad que tenemos los seres humanos de ir mejorando paulatinamente nuestra calidad de vida. Cada vez tenemos mayores posibilidades de ir consiguiendo mejoras en lo que respecta a la misma y es lógico que no queramos dejar escapar ese tren. Todos sabemos la influencia que tiene esa calidad de vida en lo que respecta a la consecución de la felicidad y es evidente que, en ese sentido, cualquier avance es de nuestro interés y a cualquiera de ellos nos agarramos. Debemos luchar incansablemente por aquello que queremos y la calidad de nuestra vida es sin duda un asunto que nos interesa… y mucho.
¿Cómo conseguimos tener esa vida? Esta es, sin duda, una de las grandes preguntas que se hacen las personas en algún punto de su vida. Y tiene varias respuestas. Sí, tener dinero y el cariño de la gente hace mucho, por supuesto. Y un trabajo que nos guste, también. Pero debemos tener claro que la pieza angular sobre la que va a girar nuestro proyecto de vida tiene que ser nuestra vivienda. De ella depende en buena medida nuestra calidad de vida y por eso tenemos que dotarla de todo aquello que entendamos que es lo mejor para nosotros y nosotras.
La piscina es uno de esos elementos que hacen de nuestra vivienda el lugar de nuestros sueños. Si le preguntáramos a la población española cuál era uno de sus deseos de la infancia, seguramente muchas personas nos dirían que disponer de una vivienda en el propio domicilio era una de sus grandes utopías. Ahora, cada vez son más quienes disponen de un elemento de estos en casa y que se benefician de todas las ventajas que van asociadas a ello. No en vano, la piscina nos ayuda a desconectar, a relajarnos y a disfrutar de nuestro tiempo de ocio al máximo.
No es de extrañar, por lo tanto, que ya sea habitual encontrarse con piscinas en comunidades de vecinos y en viviendas particulares. En lo que tiene que ver con las primeras, diremos que, según el portal web mundojuridico.info, es necesaria la aprobación de tres quintas partes de los vecinos de cada comunidad en concreto para su instalación. Sin embargo, cada vez son más los edificios de vecinos que ya vienen con las piscinas construidas. Y es que, para mucha gente, como ya hemos dicho, la piscina juega un papel imprescindible en la consecución del modo de vida que siempre hemos deseado obtener.
En total, hay más de 1.200.000 piscinas en España de acuerdo a la información manejada por El Periódico. Esos datos solo son posibles de alcanzar con piscinas situadas en viviendas y en comunidades de vecinos. Hablamos de un dato publicado a finales de agosto del año pasado, pero que seguro que ya se ha quedado viejo puesto que la construcción de piscinas está en auge y superará ampliamente a la cifra que os hemos indicado en la actualidad. La tendencia, por supuesto, va a seguir manteniéndose con el paso de los próximos años.
Uno de los asuntos que más preocupan a los propietarios de una comunidad de vecinos con piscina o a los propietarios de una vivienda que cuenta también con este elemento es el coste que supone disponer de dicha piscina. Se tiende a pensar que es un coste elevado, pero no tiene por qué ser así. La experiencia adquirida por Mantenimiento Piscina Madrid indica que pequeña revisiones anuales permiten prevenir en gran medida grandes roturas y, por tanto, grandes desembolsos de dinero. No es tan caro disponer de una piscina en casa, pero hay que tener la voluntad de estar pendiente de las necesidades de la misma.
Un cambio que da un vuelco a nuestra vida
Hablamos de uno de los elementos que da un vuelco a nuestra calidad de vida. Que nadie nos malinterprete: se puede vivir bien sin una piscina en casa o en nuestra comunidad, pero está claro que disponer de ella abre un abanico de posibilidades de disfrutar de la vida sin salir de nuestro propio domicilio. Cuando soñamos con tener una vida idílica, siempre aparece una piscina en nuestra vivienda. Y quien lo niegue, es probable que esté mintiendo.
Ojalá que este tipo de construcciones se conviertan cada vez en más habituales en las viviendas de los españoles y las españolas. Esto querrá decir varias cosas: que va a mejorar nuestra calidad de vida, que vamos a poder disfrutar de los nuestros, que vamos a estar más motivados para conseguir lo que queramos… Todo son ventajas. Hay mucha gente que daría lo que fuera por poder contar con una de ellas y que tiene pensado, en algún momento de la vida, intentar conseguir ese propósito. No nos extraña lo más mínimo.