El armario perfecto

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¿Alguien sabe cómo es el armario perfecto? Pues antes de investigar y leer opiniones de expertos, yo pensaba que el armario perfecto era aquel que se adaptaba a las necesidades de cada persona. Es decir, aquel que te permitía tener toda tu ropa y complementos guardaos y organizados. Y el caso es que tenía razón, solo que la forma en la que podemos conseguir ese armario perfecto pasa por conseguir una buena base, tener un orden impecable y una organización impoluta. Pero no es necesariamente Marie Kondo quien nos da las claves.

La base

Si tienes muchas camisetas, tal vez necesites muchos cajones en el armario, pero si lo tuyo son los vestidos largos, me temo que tendrás que copar al menos la mitad del espacio con una barra y espacio libre que te permita colgar tus prendas sin arrugar los bajos. Así pues, todo depende en parte de tus necesidades, pero ese armario base vas a necesitarlo antes de empezar a ordenar nada.

Puede que tengas muy buena voluntad y quieras ordenar tu armario, y mantenerlo así, durante toda tu vida, pero si tienes más ropa de la que cabe, o las prendas que tienes no encajan con los espacios compartimentados que tiene tu armario, conseguir tu objetivo será prácticamente imposible.

¿Cómo conseguir la buena base? Lo ideal es instalar un armario a medida que nos permita tener todo aquello que necesitamos. En Wardrobe System aseguran que todo depende de las dimensiones de la habitación y de las necesidades personales de cada uno, pero siempre es posible adaptarse. Por ejemplo, si el espacio es pequeño, tal vez nos interesen puertas correderas, pero también sería posible mirar un armario con puertas plegables o, simplemente, no poner puertas. El asesoramiento profesional es clave en este punto.

Ahora bien, si no te es posible recurrir a una empresa que te ayude a diseñar, fabricar e instalar tu armario base ideal, tal vez puedas optar por comprar cajas compartimentadas, lejas adaptables al ancho del armario y organizadores de cartón. Este tipo de accesorios podemos encontrarlos en grandes superficies tipo Ikea, pero también en bazares económicos e incluso en internet, en Amazon o Aliexpres. Si no tienes prisa para conseguir este tipo de accesorios, es decir, si tienes paciencia, te recomiendo Aliexpres porque tienen prácticamente los mismos productos que Amazon, pero más económicos, y solo tienes que leer los comentarios para asegurarte de la calidad del producto. Eso sí, hay que tener paciencia porque si no pagas envío express, el artículo puede tardar hasta un mes en llegar a casa.

Tira lo que no uses

Una vez tenemos la base, debemos pensar en qué es lo que realmente queremos guardar. Si hay algo que hace más de un año que no usas, tíralo, porque si no te lo has puesto en 12 meses no creo que lo vayas a hacer ahora, así que calcula el espacio del que dispones y asegúrate de que tu ropa quepa cómodamente en ese hueco tirando aquello que no usas.  Si tienes prendas que no te ha supuesto en un año, que no te comprarías ahora, o que ya no son de tu talla, tíralas o dónalas según su estado.

El orden

Aunque parezca una tontería, es muy importante ordenar las prendas cromáticamente, es decir, por colores, porque así no solo encontrarás lo que buscas rápidamente sino que también te resultará sencillo combinar prendas a golpe de vista.

Si tienes joyas, ya sean de abalorio o con gran valor, no puedes tenerlas desperdigadas en un cajón. Debes tener un rincón especial para ellas, ya sea en una cajita o en un joyero al uso.

Coloca todas tus prendas básicas. Este tipo de prenda funciona en casi cualquier situación y casi en cualquier combinación, por lo que si coges un pantalón que te gusta en una punta del armario y no sabes con qué puedes ponértelo, será fácil acudir a tu cajón de camisetas básicas y sacar una de un color que combine.

Para guardar jerséis o camisetas, e incluso sudaderas y otras partes de arriba, hazlo al estilo Marie Kondo y guárdalas en armarios o baldas. Este tipo de prendas ocupan mucho menos espacio así que colgadas, y además así podrás ver todas tus camisetas de un plumazo.

Todas aquellas pendas de pequeño tamaño, así como accesorios como cinturones o fulares, deberán ir organizados en su propio compartimento. Con esto pasa lo mismo que con las joyas, si lo metes todo a lo loco en un cajón al final no encontrarás nada.

Y hagas lo que hagas, intenta no volverte loca al buscar algo que no encuentras, igual lo tienes para lavar o en el tendedero y por culpa de buscarlo acabas desorganizando todo el armario en 5 minutos.

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